Encuentro Overland estuvo en la inducción de la escuela de manejo de Aventura 4×4 en un recorrido en un sector desértico que esconde una naturaleza maravillosa y contrastada.
Ha iniciado una amistad con Aventura 4×4, una organización que se dedica a los viajes en el desierto con la finalidad enseñar a muchos sobre la conducción en el desierto, geografía predominante en la costas del Perú. He recibido la invitación a compartir con ellos todo el recorrido para disfrutar de la experiencia y conocer a los entusiastas del todo terreno peruano.
Nuestros amigos de Aventura 4×4, han acumulado una vasta experiencia en la conducción sobre arenas de desierto y ahora la comparten a través de reuniones de fin de semana con los entusiastas que desean iniciarse en la conducción sobre estos escenarios o para quienes ya tienen conocimiento pero desean hacer recorridos acompañados de más personas lo que se traduce en seguridad y tranquilidad.
Al sur de la ciudad de Lima se encuentra la población de Chilca, una zona con arenales a orilla de la costa por donde pasa la Panamericana Sur dividiendo el poblado del desierto, que también tiene cordillera montañosa.
La Inducción
Una vez reunida la carava con más de quince camionetas de múltiples marcas, la mayoría estándar se inició una reunión donde todos conversaron sobre su experiencia en manejo, y la organización hizo su presentación de las técnicas que se aplicaran en el recorrido inicial como es la aceración en subidas y bajadas, recuperación con eslingas y planchas. Una vez finalizada la exposición se inicio el primer recorrido en un circuito de dunas donde cada uno de los conductores hicieron el uso correcto de la reductora y en pocos casos de la eslinga.
Un paseo de contrastes
Una vez que los instructores estuvieron convencidos del dominio de cada uno de los conductores inició un recorrido guiado, se recibió la instrucción por radio de hacer una caravana para emprender parte del recorrido que se manejo por largo rato dentro de arena y dunas hasta llegar a una zona donde la geografía cambia abruptamente a una zona de montañosa que se mantiene desértica sin vegetación hasta llegar a un verdor impresionante acompañado de una vasta niebla que reduce la visión a unos pocos metros. Una parada fue obligatoria para tratar de ver a los alrededores desde el mirador donde solo llegamos a visualizar una estructura abandonada donde después no pudimos dejar de visitarlo. El recorrido en la zona de montaña se volvió tan verde como los lugares más profundo de los andes, lo que llamo mucho mi atención ya que este paseo se dio inicio a través de un desierto.
La ruinas
En el sector predomina la tonalidad monocromática y la estructura de una serie de edificios y galpones donde se fabricaba cemento es una muestra de esta coloración. Una antigua mina materia prima dio vida a esta fábrica de cemento que hoy se mantiene erigida pero fuera de funcionamiento hace muchos años, siendo de pasatiempo para los más curiosos que se aventuran en 4×4 o motos hasta estos lugares.
El retorno
Quizás la parte mas divertida del recorrido, aunque en todo momento estuve a bordo del auto guía, en alguna oportunidades cambie de vehículo para continuar en la captura de fotografías desde distintas partes de la caravana. Estos cambios de auto me permitieron percibir el dominio en la conducción por parte de los principiantes y otros un poco más experimentados cuando ya en el viaje avanzábamos a una velocidad más rápida y con mas emoción, lo que indicaba que estaban sumando pericia para divertirse un poco más. Así fue como llegamos a una zona donde dos comtas de arena serpenteaban una especie de canal por donde se movilizo la caravana hasta llegar nuevamente a la carretera donde se hizo la despedida.
De esta forma transcurrió mi primer recorrido con el equipo de instructores y entusiastas de Aventura 4×4 en el sector de Chilca, donde empecé a conocer a profundidad el desierto peruano en vísperas del rally Dakar, que estará recorriendo estos lugares en dos oportunidades este próximo 2019.
